“La historia económica argentina
es la historia de los grandes escándalos financieros provocados por los
empréstitos, que se concertan para negociados”. Dr. José Antonio Terry
(1846-1910) abogado, financista y político argentino
Objetivo de la deuda: Desde el empréstito de la Baring Brothers,
que tenía por misión encubierta el endeudamiento de las Provincias Unidas, para
mantener en lo sucesivo un territorio tributario más para la Corona Británica.
Queda demostrado en la realidad, justamente con el tipo de modelo económico
agroexportador reafirmado desde 1890. Sistema que “explotó” con la crisis de
1929. Los intentos de industrialización manufacturera, muy tímidos, fracasaron
ante la indiferencia de la oligarquía vacuna y las presiones de del Reino
Unido. A partir de 1943 se inició un período que benefició a la industria
liviana, se produjeron bienes de consumo; la industria pesada se afirmó a partir
de 1958 con la consolidación de SOMISA para producir acero. Agreguemos que las
tres patas de la industria pesada, son el acero, el carbón y el petróleo.
El golpe de 1955. A partir de ese año, mediante la gestión
económica de Raúl Prébisch, comenzó una serie de endeudamientos patrocinados
por distintos gobiernos de tendencia liberal (Onganía, Videla y sucesores,
Menem, Macri). Tales, argumentaron la carencia de dólares para la industria, al
mismo tiempo que pregonaban como solución, la apertura total de las
importaciones; hechos que terminaban destruyendo loa industria nacional
manufacturera. Eso se solucionaría con el completo desarrollo de esa industria:
vale decir exportar bienes con valor agregado; todo esto había sido enunciado
por el preclaro economista Aldo Ferrer.
Cipayos
y/o perduelis. Términos ya conocidos,
o sea mercenarios al servicio de intereses extranjeros y los enemigos
internos de la Patria, que siempre buscando beneficios sectoriales la
perjudicaron grandemente. Caras conocidas de antes y de hoy, con una diferencia
notable: los actuales padecen una habilidad chabacana al actuar, los de antes
tampoco eran de inteligencia suprema, pero comparados con los actuales, sin
serlo, parecían genios. Hoy todo se legitima con el dinero, elemento con que no
se puede comprar inteligencia.
Las comisiones. Hay algo de lo que nadie habla. Cada préstamo
solicitado, genera un retorno en calidad de comisión. Nadie sabe a ciencia
cierta, cuál es el valor de ese retorno y quienes fueron siempre los beneficiarios;
seguramente los destinatarios estarán entre los del grupo nombrado más arriba,
junto a otros vestidos con pieles de cordero.
La traición Menem-Duhalde. La carencia de dólares-una de las
tantas- trajo un golpe de mercado que tenía por aliados al binomio mencionado,
junto a otros corifeos. Por el lado del mercado estaban, entre otros el Grupo
Clarín, la Sociedad Rural, los “otros” incluían parte del poder sindical.
Juntos le dieron el empujón final a Alfonsín, lo demás fue cuestión de tiempo.
Con la llegada de Mingo Cavallo se cristalizó la Reforma del Estado,
destruyendo industrias básicas y vendiendo a precio vil otras que, fueron
nacionalizadas al final de la segunda Guerra Mundial ante las deudas impagables
por parte del Inglaterra. Es decir, según Dromi –el arquitecto que diseñó la
estructura legal de la entrega- “Nada de lo que puede administrar el Estado
quedará en el Estado, todo será privatizado”. Todo volvió a caer en manos
inglesas. Mientras el pueblo ignorante festejaba la estabilidad, gastando los
dólares de las indemnizaciones, producto de las ventas mencionadas; mientras el
uno a uno agonizaba lentamente al mismo tiempo que la miseria sentaba sus
reales en nuestra Patria. Y un buen día estalló
la convertibilidad, el pueblo despertó con muchísimo dolor del sueño del
engaño.
Balas y cárcel (según Espert) -para muestra basta un botón. Juntos, la coalición vendepatria, lo
viene anunciando en cada momento y culpa de todos los males al Kirchnerismo,
cuando en realidad, con yerros –uno de ellos es no haber mencionado por cadena
nacional de TV, la magnitud de la deuda y los responsables de la misma-,
agreguemos la pandemia, las vacunas que llegaron y fueron denostadas por esa
miserable oposición, se fueron levantando las industrias muy lentamente. El
PBI fue aumentando, pero el pago de la
deuda hizo imposible la mejora a la masa asalariada, dado que la deuda
adquirida y la forma de pagarla, hacen que el excedente –si lo hay- fuera
volcado a generar empleo a nivel deseado, además de invertir en nuevas
industrias de valor agregado. Más claro, cuanto más se exporte en valor
agregado, más quedará para ser invertido en la Patria; claro mejorando al mismo
tiempo el plan de pago. Judas traicionó al su maestro, dicen que fue por cinco
denarios, el Nuevo Judas,
hablo del gobernador Gerardo I° por una cantidad mucho mayor, aun no
determinada, está sembrando el caos, la desolación y la entrega del patrimonio
de nuestra Patria (el Litio). Y tiene el descaro de culpar a otros de la
reacción de sus conciudadanos. La represión es el ejemplo que faltaba para
confirmar la acción de gobierno si Juntos llega al poder. No es solo evitar
que lleguen, sino esta vez debe ponerse gente capaz en cada puesto estratégico
y los dirigentes oficialistas, deben dejar las estúpidas rencillas, porque están
dando la misma imagen que los de Juntos: los traidores a la Patria, ellos
generaron la deuda con el FMI, recuérdelo. Ciudadano piense bien su voto,
después será tarde y no alcanzará el Muro de los Lamentos.
*Dr. Héctor Pomini / 22-06-23